Dicen que en la variedad está el gusto, por eso, aprovechando mi colección disponible, comenzamos una nueva temática en el blog: Las primitivas y antiguas herramientas de corte (más conocidas por "Hachas").
Todo lo que se relaciona a continuación es un resumen breve y conciso, y su contenido puede coincidir (o no) exactamente con la Historia escrita.
Todo lo que se relaciona a continuación es un resumen breve y conciso, y su contenido puede coincidir (o no) exactamente con la Historia escrita.
Desde la prehistoria o protohistoria (depende como se quiera denominar), el hombre dispuso de numerosas herramientas que le hicieron la vida más fácil. Las primeras, probablemente fueran producto de la casualidad al descubrir que los cantos redondos del río al fragmentarse "cortaban". Desde ahí hasta nuestras modernas hachas de aleaciones metálicas se han ido sucediendo un sinfín de modelos y tipos.
Empezar es fácil, y comenzamos haciendo un pequeño y resumido comentario sobre los "Cantos Tallados" o "Choppers".
La aparición de las primeras
hachas viene ligada a la evolución de los Homínidos desde hace 5.000.000 de
años y a las capacidades de éstos para su fabricación y uso. Este periodo
cultural es coincidente con los Geológicos Cuaternario y Pleistoceno inferior
(desde el 3000 a.c.)
En África, en el Periodo Paleolítico
Inferior Arcaico, Oldvayense o Modo I (2.500.000 -1.500.000 A.C.), tuvo lugar
el alumbramiento, de las primeras piedras talladas. El Olduvayense señala el
comienzo de la Edad de Piedra, dentro del Paleolítico Inferior, que también
incluye la llamada cultura Achelense, ésta ya algo posterior. Este vocablo "olduvayense" procede del yacimiento
epónimo donde fue identificado, si no por primera vez, al menos, con rigor
científico: la Garganta de Olduvai en Tanzania.
Se ubica cronológicamente en África hacia el 2.500.000 a.c., siendo su fabricante/descubridor un miembro de la especie, Homo Hábilis o Austrolopitecus Garhi o Paranthoropus Boisei (contemporáneos aunque de especies diferentes), y en Europa entre 1.200.000 y 600.000 a.c. (Homo Ergaster – Homo Antecessor).
Su fabricación era extremadamente sencilla: consistía en la percusión de un percutor duro contra un canto de río, obteniendo un filo basto y poco desarrollado.
No obstante, perduró en el tiempo durante 1.000.000 años.
L