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Hace unos días Marcos Álvarez, uno de los amigos coleccionistas de motosierras de nuestra querida Argentina, abrió en Facebook un hilo de discusión sobre que hacer cuando llega a tus manos una motosierra antigua:
Hace unos días Marcos Álvarez, uno de los amigos coleccionistas de motosierras de nuestra querida Argentina, abrió en Facebook un hilo de discusión sobre que hacer cuando llega a tus manos una motosierra antigua:
- Dejarla como está.
- Hacerla funcionar.
- Desmontarla íntegramente y tras una labor de restauración dejarla como recién salida de fábrica.
A este hilo nos sumamos varios coleccionistas con el siguiente resultado:
1.- Jose Luis Carrillo (Esp) opinó que lo mejor era restaurarla
íntegramente y trabajar minuciosamente en el proceso.
2.- Abelardo Llama (Esp), contó que en su experiencia como
restaurador y coleccionista de viejas motosierras, ha conocido a gente de todo
tipo: La que no cambia ni un solo tornillo o una pegatina, y la que hace todo lo contrario, obteniendo una máquina restaurada en mejor estado que salida de fábrica. En
cualquiera de los casos se decanta por realizar una restauración/reparación
atendiendo al estado de la máquina.
3.- Tute Hernan Di Tella (Arg), piensa que toda máquina puede ser
mejorada y las intervenciones deben de realizarse a fondo. Extraer algo
distinto, sin cambiar la esencia es su lema.
4.- Marcos Álvarez (Arg) y promotor del hilo de discusión, llega a
la conclusión de que cada máquina es un mundo y la restauración puede ser necesaria
o no. Marca una tendencia a dejarlas tal y como están.
5.- Y para finalizar un humilde aficionado que soy yo (Esp).
En otras restauraciones sobre las que he trabajado nunca me han gustado tocar la esencia que presenta la pieza.
Sus daños, defectos y desperfectos forman parte de la esencia de la misma, y sin ellos, se pierde la esencia de lo que ha aportado el tiempo. Son como las arrugas, el pelo blanco y la boina de los abuelos, naturales y que cuentan una historia.
Al fin de cuentas el hecho de tener una máquina de 50 o 60 años como el día que salió de fábrica, hace que profanos en la materia que no la distingan de las disponibles en el mercado.
A modo de resumen, creo que las opiniones dejan las cosas más o menos como al principio, unos piensan que lo mejor es respetar el estado en que se encuentren y otros que merece la pena la restauración completa.
Siempre es buena la pluralidad de opiniones, antes de emprender una nueva labor............
Un saludo.